Obras de arte más antigua del Perú provenían de la cultura de theCupisnique, que se concentró en la costa del Pacífico, y la cultura Chavín, que fue en gran parte al norte de Lima entre las cordilleras andinas de la Cordillera Negra y la Cordillera Blanca. Trabajo decorativo de esta época, aproximadamente el IX siglo a. C., fue simbólica y religiosos en la naturaleza. Los artistas trabajaron con oro, plata y cerámica para crear una variedad de tallas de escultura y de socorro. Estas civilizaciones también eran conocidas por sus esculturas de piedra y arquitectura.
Entre el siglo VIII a. C. y el siglo I, theParacas hasta y culturas de la necrópolis Paracas se desarrollaron en la costa sur del Perú. Paracas hasta había producido complejo cerámica policromada y monocromo con representaciones religiosas.Entierros de la necrópolis Paracas habían arrojado también complejo textil, muchos producidos con sofisticados patrones geométricos.
El siglo III a. C. vio el florecimiento de la cultura urbana, Moche, en la región de Lambayeque.La cultura Mochica había producido impresionantes obras arquitectónicas, tales como las Huacas del sol y de la Luna y theHuaca Rajada de Sipán. Eran expertos en cultivo en terrazas andhydraulic ingeniería y había producido cerámica original, textiles, obras pictóricas y escultóricas.
Otra cultura urbana, la civilización Wari, floreció entre los siglos VIII y XII en Ayacucho. Su planificación centralizada ciudad fue extendido a otras áreas, tales como Pachacamac, Cajamarquilla y Wari Willca.
Arquitectura urbana alcanzó una altura de nueva entre los siglos XIV y XV en la cultura Chimú.La Chimú construyó la ciudad de Chan Chan en el valle del río Moche, en La Libertad.La Chimú fueron orfebres calificados y creó notables obras de ingeniería hidráulica.
La civilización Inca, que Unidas Perú bajo su hegemonía en los siglos inmediatamente anterior a la conquista española, había incorporado, en sus propias obras, una gran parte de la herencia cultural de las civilizaciones que le precedió.Importantes reliquias de sus obras de arte y arquitectura pueden verse en ciudades como Cuzco, restos arquitectónicos como Sacsahuaman y Machu Picchu y aceras de piedras que unía el Cusco con el resto del Imperio Inca.
